"Arqueología subacuática. El tapón de un ánfora de 2.000 años, conserva todas sus propiedades"
El Museo de Arqueología de Catalunya en Empúries ha acogido, hoy 23 de mayo, el acto de presentación de las conclusiones del estudio que compara tapones de corcho actuales con otros de más de 2.000 años de antigüedad hallados en ánforas subacuáticas de finales de siglo I a.C en el pecio de Cap de Volt en el municipio de Port de La Selva.
lunes, 29 de octubre de 2012
EL CIERRE IDEAL
"Un análisis realizado en 2010 muestra que 72 de las 100 mejores marcas de vino estudiadas ultizan tapón de corcho, lo que supone que cinco firmas más, respecto al año anterior, han pasado a utilizar el cierre natural."
DesCORCHAR una botella
¿Por qué hay algunas botellas que tienen corcho, otras que tienen “corcho” de plástico (tapón sintético) y otros que tienen simplemente una tapa rosca? Y, más allá del por qué, ¿cuáles son sus ventajas y debilidades?
El corcho natural tiene la capacidad de impedir, flexiblemente, que el vino salga de la botella pero permitiendo el ingreso de oxígeno a través de sus poros microscópicos, que produce el avinagramiento o una molécula que produce un indeseable sabor a corcho. Esto desemboca en una evolución diferente del vino frente a otros métodos. Sus ventajas son la flexibilidad, impermeabilidad y larga duración. El almacenamiento de botellas con corcho implica una inclinación para evitar la sequedad del corcho, dilatando su porosidad y permitiendo el ingreso de ambos males. El tratar de sustituirlo es unicamente un tema de costo para los bodegueros, que sacando los numeros anuales, obtienen un poco mas de margen en sus utilidades.
Claro que el tapón sintético está libre del sabor a corcho y no requiere de la inclinación para el almacenamiento. Pero sí puede ser culpable de un desagradable sabor a plástico en el vino o de excesiva oxigenación por sus gruesos poros, que aporten a una oxidación veloz que dañe la bebida.
La tapa rosca es cómoda: fácil de abrir y sin necesidad de saca corchos.
A mi gusto, desde una perspectiva de consumidor y sin conocimientos técnicos sobre el almacenamiento del vino, desde un lado conservador, disfruto de usar la navaja del sacacorchos, jalar el corcho, olerlo, tocar su humedad, guardarlo y coleccionarlo. Las tapas roscas pueden resultar util para algun vino blanco de poco lujo, y los tapones de plástico me dan la sensación de vino ordinario.
Alcornoque
Es un árbol de la familia de las fagáceas, de unos 15 m de altura, copa muy ancha, hojas persistentes, fruto en bellota y madera muy dura, cuya gruesa corteza constituye el corcho.
¿Por qué se utiliza el corcho ?
Descubre cuáles son las características que hacen que este material sea único e irremplazable.
Los egipcios lo utilizaron para sellar los potes de cerámica que metían en las tumbas. Y los griegos, para tapar los envases en los que guardaban el vino y el aceite de oliva. Por diversas razones, el corcho es uno de los mejores aislantes de líquidos que existe.
A diferencia de lo que ocurre con otros materiales, la corteza de alcornoque tiene el “poder” de contener el vino al mismo tiempo que le brinda la mínima oxigenación que necesita para madurar y para que no se abombe. De no tener ninguna fuente de oxigeno, el dióxido de azufre que tiene el vino se desintegra y produce un mal olor.
“Por dentro, el corcho parece un panal de abejas lleno de gas, el 89,7% es gas, lo que lo hace ligero y flotante”, señala la página web Gizmodo. Es este gas el que se libera en mínimas cantidades, aireando así al vino. Y, como no proviene del exterior, no contiene aromas externos que puedan afectar el de la bebida.
Además, una vez que se ha cerrado una botella con un corcho -el que por su estructura es capaz de comprimirse-, el líquido no lo corroe ni es capaz de empujarlo. De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, pedazos de corcho pueden permanecer sumergidos en líquido durante siglos sin malograrse.
lunes, 22 de octubre de 2012
ALGUNAS APLICACIONES
Manufactura Secundaria
En el segundo proceso el corcho de peor calidad y los restos de las planchas de buen corcho se limpian, trituran, aglutinan y prensan para obtener un aglomerado de corcho en muy diversas presentaciones: gránulos, planchas, rollos, barras, u otras formas geométricas. Su uso es variado, pero el principal es para la elavoracion de los denominados tapones tecnicos para botella.
En la transformación de granulado en aglomerado para tapón,
es necesario incorporar sustancias aglutinantes que actúan como adhesivo entre
los gránulos de corcho. Tienen distintas composiciones químicas y sus
especificaciones se deben ajustar al tipo de aplicación al que se destinan. En
cualquier caso, confieren al aglomerado una estructura de elevada cohesión con
propiedades físicas y mecánicas similares a las del corcho natural, así como su
color y aspecto; aunque, lógicamente, con diferencias con respecto a este (por
ejemplo su densidad está en torno al doble).
Las colas o aglutinantes han de ser aptas para uso
alimentario y deberán otorgar al tapón un grado de adhesión tal que, en las
condiciones usuales de temperatura, humedad y esfuerzo físico, no se produzca su
disgregación o desaglomeración.
Hay varios procesos de fabricación de tapón aglomerado. Todos tienen en común la mezcla de los granulados con la cola y la estabilización del aglomerado para, posteriormente, ser mecanizado y obtener el producto
Extrusión.
Una mezcla de granulado, aglutinante y lubrificante, dispuesta en una tolva, alimenta a un cilindro sometido cíclicamente a la presión de un pistón. Por el extremo contrario del cilindro, vamos obteniendo una barra de aglomerado en forma continua, que será cortada y lista para mecanizar después de un periodo de estabilización.
Pasos Siguientes.
La secuencia de operaciones a partir de este momento suele ser la siguiente: rectificado de barras o tochos, lijado de cabezas, biselado del cuerpo, marcado del tapón, lavado, tratamiento superficial, escogido, conteo y envasado.
Hay varios procesos de fabricación de tapón aglomerado. Todos tienen en común la mezcla de los granulados con la cola y la estabilización del aglomerado para, posteriormente, ser mecanizado y obtener el producto
Extrusión.
Una mezcla de granulado, aglutinante y lubrificante, dispuesta en una tolva, alimenta a un cilindro sometido cíclicamente a la presión de un pistón. Por el extremo contrario del cilindro, vamos obteniendo una barra de aglomerado en forma continua, que será cortada y lista para mecanizar después de un periodo de estabilización.
Pasos Siguientes.
La secuencia de operaciones a partir de este momento suele ser la siguiente: rectificado de barras o tochos, lijado de cabezas, biselado del cuerpo, marcado del tapón, lavado, tratamiento superficial, escogido, conteo y envasado.
Manufactura Primaria
Existen fundamentalmente dos procesos distintos para el tratamiento del corcho. El primero de ellos es el utilizado para la creación del tapón de corcho de las botellas. En este proceso, el corcho es hervido a 100 grados durante aproximadamente una hora, después se deja curar el corcho durante un año. Este corcho una vez curado se hierve una segunda vez, se corta en tiras y se perfora para crear los tapones.
EXTRACCION
La extracción del corcho del alcornoque es lo que se denomina la 'saca del corcho'. Esta saca se hace sobre todo durante el mes de julio, que es el mes en el que el corcho puede ser separado del árbol sin dañarlo. En esta época los trabajadores denominados 'peladores' extraen la corteza del alcornoque cortando con un hacha y uniendo las grietas verticales del corcho.
Así retiran lo que se denomina planchas de corcho.
El corcho se puede extraer por primera vez cuando el árbol tiene aproximadamente 25 años, pero este dato depende mucho de la calidad de estación, ya que el parámetro a medir es cuando el árbol tenga una circunferencia altura de pecho mayor de 60 cm sobre corcho. Este primer corcho se denomina BORNIZO, patrón o corcho de belenes, sólo válido para la elaboración de elementos decorativos y aislamientos termoacústicos, dada la dificultad de separar del corcho la fina corteza leñosa externa de color grisáceo, por lo que no se puede utilizar para aglomerados para uso alimentario, dado que no sería 100% corcho. Tras esta primera saca se puede sacar corcho cada nueve años, dependiendo de la calidad de estación.
Así retiran lo que se denomina planchas de corcho.
El corcho se puede extraer por primera vez cuando el árbol tiene aproximadamente 25 años, pero este dato depende mucho de la calidad de estación, ya que el parámetro a medir es cuando el árbol tenga una circunferencia altura de pecho mayor de 60 cm sobre corcho. Este primer corcho se denomina BORNIZO, patrón o corcho de belenes, sólo válido para la elaboración de elementos decorativos y aislamientos termoacústicos, dada la dificultad de separar del corcho la fina corteza leñosa externa de color grisáceo, por lo que no se puede utilizar para aglomerados para uso alimentario, dado que no sería 100% corcho. Tras esta primera saca se puede sacar corcho cada nueve años, dependiendo de la calidad de estación.
APLICACIONES
El corcho es un elemento natural, extraído de un árbol igual al que podemos ver en la foto. Se trata de un material con grandes propiedades como aislante y fonoabsorbente, o sea que impide el ingreso de ruidos y sonidos en los ambientes en los que se aplica, gracias a su porosidad.
Pocos materiales manifiestan al tiempo tantas características útiles. Por solo citar algunas de sus propiedades, el corcho es impermeable, inodoro, resistente a los agentes químicos e inatacable por los líquidos, prácticamente imputrescible y muy resistente a los ataques de los insectos, compresible y elástico, con extraordinaria capacidad de recuperación dimensional, escasa conductividad térmica, excelente aislamiento acústico y de vibraciones, muy liviano y con elevada resistencia mecánica. Dadas sus extraordinarias características, no es extraño que el corcho tenga múltiples aplicaciones. Algunos de sus usos son ya muy antiguos. En muchos casos, materiales sintéticos lo han substituido parcialmente. Pero, en realidad, en la mayoría de sus utilizaciones no tienen rival. Entre otras aplicaciones, el corcho se utiliza en construcción naval, donde se emplea desde como aislante térmico y antivibraciones hasta en pavimentos antideslizantes, cinturones y armillas de salvamento, boyas, etc. En la fabricación de maquinaria se utiliza en bancadas flotantes reductoras de vibraciones, juntas para motores, transformadores, etc. La industria del vidrio y la cerámica también utiliza granulado y polvo de corcho, discos para pulir y ladrillos refractarios. Para no cansar enumerando los distintos usos, baste recordar que, además, el corcho se utiliza en la construcción, la industria del frío, los accesorios para automóviles y aeronáutica, la industria química y farmacéutica, la del calzado, la imprenta y en la fabricación de artículos deportivos.
Pero quizás la utilización más clásica y la más importante desde un punto de vista económico sea la de tapamiento de vinos y otras bebidas. La fabricación de tapón de corcho supone el 85% del volumen de negocio del sector corchero en España y en el mundo. Si nos referimos al empleo generado probablemente tendríamos que hablar al menos del 90%. A pesar de las campañas de desprestigio que tan injustamente están desarrollando los fabricantes de otros sistemas de tapamiento, mucho menos idóneos tanto desde el punto de vista medioambiental como de la crianza de los vinos, el tapón de corcho no tiene rival para este fin, hasta el punto que corcho y vino constituyen una conjunción indisoluble.
domingo, 21 de octubre de 2012
ESTRUCTURA
Las células del tejido suberoso son unidades muertas y llenas de aire. La oquedad de éstas se debe a que el crecimiento y suberificación de las membranas pierden el contenido celular.
La disposición que presentan es bastante regular, en hiladas radiales y encajadas unas en otras gracias a su forma geométrica formando en conjunto tandas circulares superpuestas. Y debido, precisamente, a esa disposición, posee el corcho gran parte de sus cualidades, tales como la elasticidad y la resistencia.
La membrana celular contribuye a las características específicas del corcho. Esta pared que separa los huecos citados anteriormente se halla formada por cinco capas: dos celulósicas, que son las que están en contacto con la cavidad celular; otras dos, suberificadas, de espesor notablemente mayor, y la quinta, lignificada, y por otra parte la más interior de todas, constituida a su vez por dos tabiques de espesor microscópico, íntimamente ligados. Las dos capas intermedias suberificadas, compuestas por estratos de suberina y cera, alternantes, son las que prestan al corcho la elasticidad especial que tanto lo avalora.
Las células están atravesadas por los "plasmodermos", canalillos cuyo diámetro tiene una dimensión aproximada de 6x10 mm, y que, conectando unas células con otras, hacen que un grupo de ellas actúen como un sistema de vasos comunicantes, es decir, que tienen lugar movimientos complejos de vapor de agua, en un sentido u otro, según predominen los macroporos o los microporos.
¿QUÉ ES EL CORCHO?
El corcho es la corteza de los alcornoques (Quevcus suber) que los protege frente a las condiciones extremas del clima mediterráneo, como son la sequía, las altas temperaturas estivales y los incendios. Está constituido por células muertas cuyo interior se llena de un gas similar al aire. Ese gas constituye casi el 90% del corcho, de ahí su levísimo peso y su compresibilidad. Las paredes de esas células, que son como minúsculos compartimentos estancos, están constituidas fundamentalmente por suberina y cerina, substancias que lo hacen bastante ignífugo, muy flexible y prácticamente imputrescible. El corcho es, pues, un material extraordinario, de propiedades únicas. Es un producto completamente natural, renovable y biodegradable. Por ello, su producción no produce ninguna contaminación ni perjuicio al ecosistema del que se extrae, ya que se obtiene por descortezamiento del alcornoque, sin cortar ningún árbol y esa "cosecha" se realiza cada 9 a 12 años.
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